Iván Bolaño y Antonio Torres en el podium del circuito de Jerez. | DB77.

 

En Supersport 300, durante las jornadas de libres, los jóvenes del box trabajaron de lo lindo, para poner a punto sus motos de cara a las intensas carreras que siempre se disputan en el trazado andaluz.

Antonio Torres, en el crono, pudo marcar una buena vuelta que le llevó a salir en la parte delantera. Tras una buena salida, mantuvo una lucha encarnizada, curva a curva, durante la primera de las carreras programadas. Finalmente, con un grupo demasiado numeroso, finalizó cuarto de la general y tercero entre las Kawasaki, con grandes esperanzas para el domingo. En la segunda carrera, lideró y rozó la victoria con sus dedos, pero finalmente, y de nuevo, se quedó a las puertas del pódium con una quinta posición y cuarto clasificado entre las Kawasaki.

Iván Muñoz ha completado un fin de semana de progresiones. Se ha clasificado dentro del top diez, salió a carrera dispuesto a recuperar su sitio, y así fue. En ambas carreras ha disputado las plazas del grupo delantero y, aunque haya finalizado en séptima y undécima posición, sabe mejor el paso adelante afianzado que hace que vuelva a la lucha por las posiciones altas.

Iván Bolaño es quien, sin duda, ha sorprendido más este fin de semana. De principio a fin ha disputado las plazas delanteras, y en la primera de las mangas demostró ser el más fuerte en pista, merecedor de la victoria. Con final de foto finish, acabó tercero a milésimas de la victoria, pero con una satisfacción que solo le daba motivación para dar su máximo de nuevo el domingo. De nuevo, una gran salida y una increíble lucha le marcaba como el más sólido, liderando de nuevo en varias ocasiones, pero un lance de carrera le ha llevado al suelo, acabando con ello todas sus posibilidades. Sin consecuencias, el piloto espera con ansia la próxima cita para continuar en esta buena línea.

Tomás Marín ha visto de nuevo como el trabajo duro da su resultado. Ha rebajado su propio récord de pista, además de conseguir mejorar su ritmo de carrera. Una mala salida en la primera de las mangas y una dura disputa con sus rivales en la segunda, le ha llevado a no poder demostrarlo con el resultado que esperaba. Aunque las sensaciones siguen en línea de progresión a pasos agigantados en Montmeló continuará con el trabajo con más ilusión que nunca.

Uriel Hidalgo ha sido otro de los que ha tenido una dosis de cal y otra de arena en esta carrera. En su primera vez con la Kawasaki Ninja 400 en el circuito, el piloto impresionaba de nuevo, siendo un fijo del grupo delantero, disputando las plazas de honor. En la primera de las mangas tuvo una caída sin consecuencias, pero, en la segunda, esperando resarcirse, salió con la mente puesta en el podium. La gran rivalidad del grupo llevó a que las plazas del cajón se vendieran muy caras, aunque el catalán las peleó al máximo, finalizando noveno.

En la categoría de 600, el fin de semana ha estado lleno de contrastes. Guillem Erill, en Supersport Next Generation, comenzó cogiendo el ritmo tras su caída en Navarra. En un crono que no fue del todo como le gustaría, consiguió salvar los muebles, pero el piloto controló la primera carrera de manera que finalizó sexto, tras una remontada bien trabajada.

Sergio López en Superstock 600 tampoco tuvo un buen crono. En la primera de las mangas, saliendo desde final de parrilla, fue superando a otros pilotos y escalando posiciones, hasta que un error le llevó a salirse de la pista y no poder rematar con la posición que le habría gustado terminar, llegando en la decimoquinta plaza de su categoría. En la jornada del domingo, dos banderas rojas impidieron la reanudación, por tercera vez en la carrera, por tanto, se dio por anulada dando por finalizado el trabajo del fin de semana para la categoría.

Con dos semanas de descanso, el equipo cordobés podrá trabajar en las máquinas y reponer fuerzas, antes de dirigirse hacia la siguiente cita de la temporada, con ocasión del Campeonato de Andalucía de Velocidad, de nuevo, en el circuito de Jerez Ángel Nieto.