En el día de su 53 cumpleaños, confinado como cualquier español, y deseando que todo esto acabe para retomar su actividad como técnico del Córdoba CF, club al que llegó escasos días antes de que el gobierno decretara el estado de alarma, Juan Sabas, que está a la espera de su debut como técnico cordobesista, ha ofrecido hoy unas declaraciones a PTV Córdoba.

Lo primero que reconoce Juan Sabas es que realizó “tres sesiones de entrenamiento y ya se paró la competición. Lo que he hecho en este tiempo es analizar en profundidad al equipo y a los rivales que tenemos por delante y estar en permanente contacto telefónico con los jugadores, los preparadores físicos, los fisios y el doctor para que todo vaya correctamente, dentro de lo anormal que supone estar así, en esta situación”.

El nuevo técnico blanquiverde ha reconocido que sólo telefónicamente ha podido trasmitir sus premisas tácticas a los jugadores “das detalles de lo que quieres de cada futbolista, lo que ves en algún futbolista que es erróneo, pero a mí me gusta hablar esas cosas cara a cara, me gusta ponerles algún vídeo, no muy largo pero sí concreto, en cuanto a nivel individual o colectivo de situaciones en las que creo que tenemos que mejorar. Hemos estado trabajando para tener tres o cuatro vídeos preparados en los que queremos incidir para que el equipo mejore en los próximos compromisos”.

El técnico desvela que no tuvo dudas para firmar por el Córdoba “cuando me llamó no tuve dudas. Un club como el Córdoba para mí es increíble. Yo espero que toda la confianza que ha depositado en mí el club y la reticencia que pueda tener la gente, porque soy el tercer entrenador, vamos a intentar cambiarla y convertirlo todo en alegría con victorias y en intentar conseguir el objetivo que no es otro que jugar la liguilla de ascenso y ascender. No hay otra cosa que pase por mi mente que no sea ascender con el equipo. Luego es verdad que los rivales y las circunstancias de los partidos te ponen en tu sitio y puede que no lo consigamos. Yo tengo mucha fe en el trabajo que realizamos y tengo mucha fe en la plantilla y mucha fe en el club y creo que lo vamos a conseguir”.

Tras dos derrotas consecutivas en los dos últimos partidos, además en El Arcángel, el Córdoba se quedó a dos puntos de la zona de play off, pero con diez jornadas por delante, el objetivo puede ser factible “no es una situación…si quedaran poquitas fechas puedes depender de otros equipos que van por delante, pero ahora mismo depende uno de lo que realice el equipo en los partidos que quedan. Dependemos de nosotros mismos. Si nosotros ganamos partidos podemos estar ahí entre los cuatro primeros. Creo que un equipo como el Córdoba, con esa ciudad y ese estadio empujando, con esas condiciones de trabajo que hay que son magníficas, si te metes en la liguilla de ascenso creo que lo vamos a lograr. Hay que tener muchísima fe y yo la tengo. Mi labor es transmitir eso a todo el mundo, los jugadores, a la gente que trabaja con nosotros, al club y a la afición. Soy una persona que me dejo el alma en esas cosas”.

Pero lógicamente, el primer objetivo no es otro que meterse entre los cuatro primeros “llegar a pensar en ser campeón está muy lejos. El primer objetivo es meterse entre los cuatro primeros. Cuando subí con el Extremadura dependíamos de otros equipos, pincharon, nosotros ganamos los partidos que nos quedaban y luego afrontamos el play off con una moral increíble y eso es lo que debemos hacer, intentar transmitir al jugador que todo el año ha sido el equipo irregular, que yo soy el tercer entrenador porque no han sido los resultados apetecidos por parte del club y que necesitamos esa regularidad para meternos entre los primeros y luego nos va a dar una inyección de moral increíble verte en la liguilla de ascenso. Hay una plantilla buena, un buen grupo y si conseguimos el objetivo de meternos entre los cuatro primeros, independientemente del puesto en el que sea, tenemos muchas posibilidades de ascenso, pero lo primero es meterse. Si no conseguimos el objetivo, entonces será un fracaso entre comillas la temporada”.

La plantilla blanquiverde es veterana pero experimentada y lo que tiene claro el técnico es que “lo que vamos a hacer en cuanto volvamos a la rutina diaria de trabajo es exigir al futbolista máximo de profesionalidad. Tenemos unas condiciones de trabajo que no tienen otros clubes y tenemos que aprovecharlo. Intentaremos exprimir al máximo, sacar el rendimiento absoluto de cada futbolista, tenemos una plantilla corta, muy veterana y tendremos que lidiar seguramente con partidos en miércoles y domingo, y eso puede ser un hándicap. También puede ser un hándicap el que se juegue a puerta cerrada, pues nosotros si jugamos en nuestro campo tenemos la ventaja porque tenemos mucha más afición que otros equipos, pero asumiremos lo que corresponda con muchísima profesionalidad y con entereza e intentaremos hacerlo lo mejor posible”.

En lo que sí confía Juan Sabas es en volver a jugar de nuevo esta temporada “soy una persona muy optimista siempre. En este caso no lo soy tanto porque no he vivido nunca esta situación. Parece una película, estamos viviendo una película de esas que ves en la televisión. Soy optimista y tengo mucha fe en conseguir resultados positivos con mis equipos. El tema de jugar o no, se me escapa de las manos. Es complicado dar una opción y decir si se va a jugar o no, pues son los estamentos que mandan los que tienen que decidir, no nosotros”.

Juan Sabas, que decidió marchar hacia su casa en el arranque de la cuarentena, explica que al principio estaba “en Córdoba solo, en el hotel. El club me facilitó un apartamento pequeño que estaba bien pero era pequeño y me agobiaba. Estuve 12 días solo porque no sabía si nos reincorporábamos o no, si íbamos a poder entrenar aunque fuera a diferentes horas con los jugadores en la Ciudad Deportiva. Cuando pasaron 12 días y veía que no se podía volver, me volví a mi casa de Madrid. Estoy a 50 kilómetros de Madrid, que ha sido un caos. Tengo una casa grande que me permite caminar por el jardín y estar al aire libre y eso me ha dado vidilla. Estoy con mi mujer, su hermana y mi sobrina, lo que te da más vida que estar solo. Me he adaptado a las dos situaciones bien. En casa es mejor porque me da la opción de salir al aire libre. En el apartamento estaba más confinado y al estar solo se hacían las horas más largas, aunque trabajas mejor porque al estar solo coges el ordenador y estás todo el día dándole vueltas a la cabeza para intentar mejorar en muchos aspectos, sobre todo en el tema de análisis, tanto de rivales como de tu propio equipo”.
Para finalizar, Juan Sabas concluyó afirmando que desea “de corazón y tengo mucha fe en que vamos a conseguir los objetivos”.