Alfonso Serrano y Miguel Valenzuela.

La destitución de Raúl Agné y la posterior designación de Juan Sabas como nuevo entrenador del Córdoba, ha demostrado la bicefalia existente en la dirección deportiva del equipo.

El Córdoba CF cuenta oficialmente con un director deportivo, Alfonso Serrano, que en esta operación ha demostrado no contar para nada para el consejo de administración, al cesar al entrenador y amigo personal Raúl Agné, y posteriormente sin consulta alguna con él para firmar a Juan Sabas como nuevo entrenador, previo asesoramiento del director deportivo en la sombra, Miguel Valenzuela.

No sabemos que quiere demostrar con esto el consejo de administración del Córdoba CF, pero lo que sí demuestra es una bicefalia -entre dos personas-, para el mismo cargo y además con diálogos inexistentes entre los dos, que no se tapan en hacerlo públicamente ya que cuando acuden a los entrenamientos se sitúan en zonas completamente opuestas.

Posteriormente, en la rueda de prensa de la despedida de Raúl Agné éste ha demostrado ser un “rara avis” en el mundo de los entrenadores. Ha tenido la valentía suficiente para decir, sin pudor, que su destitución le ha parecido injusta y ventajista, a la vez que decirle a dos consejeros que se equivocan y que quieren apagar el fuego con gasolina.

Estas declaraciones rompen totalmente los comentarios insulsos y llenos de tópicos a los que estábamos acostumbrados después del cese de un entrenador. Enhorabuena a Raúl Agné por ser como es y por demostrar esa valentía.