El Córdoba cayó de nuevo con contundencia y rubor, si es que alguno la siente, ante el Zaragoza (0-3), un equipo que llegaba muy necesitado de puntos a El Arcángel y que tras derrotar a los blanquiverdes se sitúa ya con un colchón de siete puntos sobre el descenso, dejando a los cordobesistas a 13 de una permanencia que ahora marca el Tenerife.
El panorama, desolador desde el inicio, con un graderío semivacío, con la peor entrada de las últimas temporadas y, como en los últimos encuentros, los aficionados abandonando el campo en los compases iniciales del segundo tiempo. Además, los pocos aficionados que asistieron al partido, mostraron su malestar y su divorcio con un equipo del que se pueden salvar pocos. De nuevo en fases de partido y por momentos, apareció la desidia, la desgana, la falta de compromiso y de actitud en muchos de los componentes de una plantilla que por su errores y falta de compromiso más se asemeja a un equipo sénior de categorías inferiores que a un club profesional.
El partido resultó nefasto para el conjunto que dirige Rafa Navarro. Y eso, que durante el primer acto, tampoco parecía que el conjunto maño se estuviera jugando tanto. Quizás esperaba su momento para golpear a un equipo que pocas veces se repone si le dan primero. Y el caso es que pasado el primer cuarto de hora fue el Córdoba el que se pudo adelantar en el marcador, pero el remate de Andrés Martín, el único que se puede salvar con nota de los hombres que dispuso Rafa Navarro sobre el césped, lo repelió el larguero; y que a la media hora, sin que entre medias hubiera pasado prácticamente nada, Andrés volviera a estrellar otro balón en la madera.
El Zaragoza tenía más el balón, aunque carecía de profundidad, verticalidad y remate. Algo que sí tuvo Andrés Martín, el único que lo intentó en los blanquiverdes y que hizo trabajar en dos ocasiones antes del descanso al meta Cristian Álvarez; e incluso asistió a Álex Carbonell instantes antes del descanso, pero su remate se marchó desviado.
Tras la reanudación apareció rápidamente el Zaragoza, y Marc Gual, tras un centro de Delmás,remató muy ajustado al palo. De inmediato, tras un error pueril de los cordobesistas, se adelantó en el marcador el Zaragoza. Álex Menéndez realizó un saque de banda hacia atrás, y tras una acción infantil de Luis Muñoz, Marc Gual se quedó solo ante Marcos Lavín, lo regateó y marcó gol a puerta vacía.
El Córdoba quiso reaccionar y Alfaro, tras una pérdida de balón de Eguaras, se metió rápido en el área y remató fuera por poco. Incluso Chus Herrero estuvo muy cerca de marcar a la salida de un saque de esquina. Pero de inmediato, un nuevo error infantil de Luis Muñoz propició que Gual asistiera a Álvaro Vázquez, que no atinó a batir a Marcos Lavín. Parecía momentos de ida y vuelta y Andrés Martín obligó a Cristian Álvarez a intervenir con apuros para salvar el empate.
Pero el Zaragoza no estaba dispuesto a irse de vacío ni a pasar apuros. Tras una jugada trenzada del conjunto maño, Marc Gual quebró a Luis Muñoz y dobló la diferencia en el marcador. Sin tiempo ya a una posible reacción local, y tras un mal control de Álex Carbonel, recogió el balón Marc Gual, se marchó de Chus Herrero y batió por tercera vez a Marcos Lavín. La afición blanquiverde explotó y muchos abandonaron el estadio.
En el tramo final, a la salida de un córner, Chus Herrero cabeceó con intención, pero su remate tropezó de nuevo con el poste.
Córdoba 0 – 3 Zaragoza
Córdoba: Marcos Lavín; Fernández, Chus Herrero, Luis Muñoz, Menéndez, Álex Vallejo (Carrillo, 61′), Alfaro (Javi Lara, 73′), De las Cuevas, Bodiger, Álex Carbonell (Álvaro Aguado, 80′) y Andrés Martín.
Zaragoza: Cristian Álvarez; Delmás, Guitián, Verdasca, Carlos Nieto, Eguarás, Javi Ros, Soro (Raúl Guti, 32′), Pep Biel, Álvaro Vázquez y Marc Gual.
Árbitro: Varón Aceitón (balear). Mostró cartulina amarilla a los jugadores locales Luis Muñoz y Javi Lara; y al visitante Pep Biel.
Goles: 0-1 (49′) Marc Gual. 0-2 (74′) Marc Gual. 0-3 (77′) Marc Gual.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la 36ª jornada de Liga en Segunda División disputado en El Arcángel, que contó con la presencia de 6.688 espectadores.