La selección absoluta de España de Fútbol Sala regresó a Córdoba, a Vista Alegre, 23 años después. Y lo hizo a lo grande, dándose un auténtico festín ante Hungría, una selección que en ningún momento pudo detener el empuje y el buen hacer del combinado que dirige Fede Vidal.
El duelo comenzó con mucho ritmo, los jugadores del combinado español eran conscientes de que el técnico iba a rotar de cuatro en cuatro y cada poco tiempo, por lo que imprimieron una gran intensidad desde el pitido inicial. El cordobés Bebe, muy aplaudido por una afición volcada con España, pero en especial con él y con Fernan, que arrastró desde tierras granadinas un buen número de aficionados, disfrutó de la primera oportunidad clara de peligro en un mano a mano forzado por Rafa Usín, que en el inicio de la jugada hizó vibrar a los aficionados con un doble caño en la misma jugada. Berbe, sin embargo, no pudo superar al meta Marcell Alasztics.
España tuvo que esperar al minuto cinco para inaugurar el marcador y lo hizo gracias a la estrategia. Sergio Lozano largó un derechazo ante el que no pudo hacer hada el meta húngaro. El jugador dedicó el gol a su padre, recientemente fallecido. En estos primeros minutos de partido sí pudo marcar Hungría, pero Jesús Herrero, muy atento, sacó bien el balón por abajo.
Sin tiempo a que la reacción húngara se dejara notar, Fernan mandó al fondo de la red de volea un córner botado por Marc Tolrà. Minutos antes del descanso, de nuevo a balón parado, Aicardo aprovechó la sexta falta magiar para ampliar diferencias al transformar un doble penalti. Todavía pudo ser mayor la renta antes de enfilar a vestuarios, pero Adolfo, que también tiene ascendencia cordobesa, se topó con la madera en una nueva jugada de estrategia.
Tras el descanso no varió nada. España mantenía el control y el dominio con intensidad y presión alta, dejando al meta como mero espectador. Pero el gol se hizo de rogar. Y precisamente fue un debutante, Juan Emilio, el que amplió diferencias en el marcador al culminar un rápido contragolpe bien llevado por Sergio Lozano y Eric Martel.
El gol acabó de dejar sin aliento a Hungría que en apenas cinco minutos encajó tres nuevos goles. Primero fue Raúl Campos: después, de nuevo Fernan, que tras hacer un caño a un defensor alojó el balón en el fondo de la red. Y la cuenta la cerró Fernan, que completaba un hat trick y ponía el séptimo en el electrónico.
España 7 – 0 Hungría
España: Jesús Herrero; Bebe, Pola, Lin y Rafa Usín -cinco inicial-. También jugaron Aicardo, Sergio Lozano, Adolfo, Juan Emilio, Marc Tolrà, Eric Martel, Fernan y Raúl Campos. (Fede Vidal no utilizó a Juanjo y dejó sin vestir a Miguelín y Ortiz).
Hungría: Marcell Alasztics; Richard David, Peter Komaroni, Joszef Tatai y Janos Rabl -cinco inicial-. También jugaron Bence Klacsak, Gergo Siska, Tamas Miklos, Milan Hajmasi, Kristof Kondas, Daniel Boromisza, Zoltan Takacs y Gabor Boznansky. (El técnico, Joszef Turzó, no utlizó a Aron Varsanyi.
Árbitros: Juan José Cordero y Juan Ramos Marín, con Carlos Bustos como tercero. Mostraron cartulina amarilla al español Aicardo (16′).
Goles: 1-0 (4′) Sergio Lozano. 2-0 (8′) Fernan. 3-0 (16′) Aicardo, de doble penalti. 4-0 (30′) Juan Emilio. 5-0 (31′) Raúl Campos. 6-0 (34′) Fernan. 7-0 (35′) Fernan.
Incidencias: Encuentro amistoso disputado en el Palacio Municipal de Deportes de Vista Alegre que sirve de preparación para la fase de clasificación del Mundial. La alcaldesa de Córdoba, Isabel Ambrosio, y Martín Torralbo, diputado de Juventud y Deportes, recibieron dos camisetas de la Selección en el descanso, entregadas por Pablo Lozano, presidente del Fútbol Sala de la Federación Andaluza y vicepresidente del Comité Nacional de Fútbol Sala, y José Venancio López, director deportivo.