Aritz López Garai, técnico del Numancia, en la sala de prensa de El Arcángel.

Aritz López Garai, técnico del Numancia, habló al término del partido de haber tenido sensaciones raras, primero se le puso cuesta arriba el partido y posteriormente, cuando lo tenían de cara, vio como se le escapó el triunfo “ha sido un partido de alternativas y un poco loco. No hemos entrado mal al partido. Hemos entrado como queríamos, tratando de llevar el peso del partido, sabiendo que nos podíamos esperar una contra o una acción a balón parado, como así ha sido el gol. Hemos cometido un error y se nos han adelantado. En el segundo tiempo hemos entrado fenomenal, hemos conseguido empatar, se nos han puesto otra vez por delante y cuando hemos conseguido dar la vuelta al marcador y cuando teníamos el partido para el cuarto, el Córdoba ha empujado, la gente les ha empujado, nos ha entrado el miedo a ganar y de ahí el 3-3 y al final ha podido pasar cualquier cosa”.

El técnico numantino, ex jugador del conjunto blanquiverde, explicó que “cuando recibes tantos goles, puedes hablar bien de la parte ofensiva, pero de la parte defensiva, los dos equipos somos mejorables a día de hoy. Esto acaba de empezar y en los primeros partidos suelen pasar estas cosas, algún accidente extraño, goles que luego durante el año no suelen darse, son más evitables. Pero en esta primera cita ha habido de todo, goles buenos, regulares y goles a base de errores. Creo que el Córdoba ha ido de más a menos, quitando el punch final delos últimos diez minutos que ha vuelto a engancharse, creo que la gente los ha enganchado y nosotros no hemos sabido gestionar esos minutos finales. Han encontrado su premio y creo que es un partido que, si lo analizas fríamente, ahora en caliente no se, el empate puede ser justo”.

Aritz López Garai reconoció que “esperaba un Córdoba así. A pesar de todo lo que se habla, tiene un buen equipo, tiene buenos futbolistas. El año pasado este equipo hizo una segunda vuelta sensacional y tiene un núcleo importante, quitando un par de ausencias. Sabía que iban a competir, más como locales. Cuando sales al campo y ves la gente que hay aquí, sabes que no va a ser sencillo y que van a rendir un poco más de lo normal. Luego físicamente, imagino que el cansancio y las altas temperaturas les ha hecho bajar el empuje, pero era el Córdoba que me imaginaba”.